miércoles, 14 de diciembre de 2011

enamorarme no me sienta bien

con mis casi cuarenta años y despues de unas cuentas experiencias sentimentales, de las cuales la última fué la mas devastadora y la mas hermosa, he llegado a una firme teoria (solo aplicada a mi persona)
No me sienta nada bien enamorarme.

Soy mucho mas feliz cuando mis relaciones son mas de "dejarse querer", claro, que estas relaciones no bastan y que siempre me faltará "algo" pero, al final no son buenas para mi.
Si me dejo querer, soy maravillosa, ocurrente, segura y controlo mi vida y mis actos.
Si quiero, empiezo a ser como todas las mujeres, posesiva, insegura y empiezo a descontrolar mi vida y mis actos.
Hace poco conocí a un hombre que me está haciendo sentir.
Ya estoy empezando a sentir dudas, inseguridades y hasta celos.
Y aunque sea duro, tengo que alejarme del hombre que me hace sentir, porque amar perjudica mi salud.

Empiezo a estar pendiente de sus llamadas o sus mensajes en internet y no quiero verme así.
Aunque siempre me faltará "algo" siempre seré mas yo "dejandome querer" que amando y convirtiendome en esa persona que detesto y no quiero que vuelva nunca mas.

domingo, 16 de enero de 2011

viernes, 14 de enero de 2011

tareas pendientes.

No duermo
No puedo dormir.
No puedo desactivar mi mente.
No encuentro mi grifo, para cerrar el caudal de mis pensamientos.

Mil tareas pendientes se agolpan.
Tareas pendientes, archivos abiertos que necesitan ser guardados en carpetas definitivas (de esas de cartón)
Mil flancos abiertos que deben guardar turnos para ser mal y rápidamente atendidos

Ojeras oscuras, cada vez mas instaladas en mi cara.

Mal humor. (que ese si que no se va a dormir...)

la ciencia avanza lo que puede...

Mi familia es la mejor familia del mundo, pero tengo que reconocer que tenemos carencias graves de comunicación, herencia de nuestros padres y abuelos...
Al filo de mis 11 ó 12 años y con dos hermanas mayores, no era ninuna sorpresa que el tema de convertirme en mujer (tema fatal para mi) era inminente. Yo ya veía en el cuarto de baño, compresas y alguna ropa interior de mujer manchada de sangre, algunas veces.
Mi madre nunca me sentó y me explicó de donde venía esa sangre y porque se expulsaba, ahora se ,que ella tampoco lo tendría nada claro.

No era un trauma para mi, pero si un rechazo total
Y no a convertirme en mujer, (tema inevitable,) si no a el post-mujerismo, el momento de la primera menstruación y SOBRE TODO, decírselo a mi madre, y que ella lo contara y alguien aludiera el tema en mi presencia.

Estaba convencidisima que esos desagradables momentos de menstruación,  faldas manchadas y compresas en un años acabarían que al filo del año 2000, se inventaría una pastilla que anulara el tramite mensual de menstruar. (es que la palabra menstruar ya es horrible)

Llegó el temido momento, no puedo decir ni el día ni siquiera  la edad exacta del acontecimiento. Solo se que me dio tanta vergüenza que agarré una compresa y la coloqué correctamente en el sitio indicado. Y callé.
Me parecía que tenía un almohadón gigante en mi entrepierna que todo el mundo se daba cuenta y que el ruido al andar era ensordecedor...pero  nadie hizo comentarios.
Al día siguiente, me armé de valor, viendo que la situación era insostenible, busqué el momento que solo me viera mi madre (en una familia numerosa como la mía, podías estar semanas esperando ese momento..)
En 48 horas no pude lograr que las palabras salieran de mi boca, así que quité la compresa, me bajé las braguitas, y le mostré a mi madre la mancha de sangre....solo pude decir, casi como un sollozo:  mama...

Ahora tengo 39, y me quedan 4 reglas...
Todavía la ciencia no inventó la pastilla y cada mes, utilizo compresas y tampones, y a veces manchó la cama con sangre.

El mundo avanza a pasos agigantados para algunas cosas, pero otras continúan inalterables por los siglos de los siglos.....AMEN.

Lo habéis adivinado, hoy tengo la regla.